
Terapia de Hologramas
La terapia de hologramas es una técnica alternativa y complementaria que trabaja sobre el cuerpo energético de la persona, utilizando hologramas (generalmente adhesivos) colocados en puntos estratégicos del cuerpo para estimular el equilibrio físico, emocional y mental.
¿En qué se basa?
Esta terapia parte del principio de que el cuerpo humano no solo es físico, sino que también posee un campo energético. Cuando este campo se desequilibra, pueden aparecer síntomas o enfermedades. Los hologramas actúan como frecuencias o vibraciones que ayudan a restaurar el equilibrio natural del cuerpo.
¿Cómo funciona?
Se colocan pequeños discos holográficos (sin químicos ni medicamentos) en zonas específicas como articulaciones, columna, cabeza, órganos o puntos energéticos.
Estos hologramas interactúan con el sistema energético y promueven la auto-regulación del cuerpo.
Son seguros, no invasivos y sin efectos secundarios.
¿Para qué se utiliza?
Dolores musculares o articulares (rodillas, espalda, cuello, hombros)
Estrés, ansiedad, insomnio, fatiga
Problemas digestivos, hormonales o circulatorios
Apoyo en enfermedades como artritis, hipertensión, diabetes
Mejora del estado emocional y mental
La terapia de hologramas es una técnica alternativa y complementaria que trabaja sobre el cuerpo energético de la persona, utilizando hologramas (generalmente adhesivos) colocados en puntos estratégicos del cuerpo para estimular el equilibrio físico, emocional y mental.
¿En qué se basa?
Esta terapia parte del principio de que el cuerpo humano no solo es físico, sino que también posee un campo energético. Cuando este campo se desequilibra, pueden aparecer síntomas o enfermedades. Los hologramas actúan como frecuencias o vibraciones que ayudan a restaurar el equilibrio natural del cuerpo.
¿Cómo funciona?
Se colocan pequeños discos holográficos (sin químicos ni medicamentos) en zonas específicas como articulaciones, columna, cabeza, órganos o puntos energéticos.
Estos hologramas interactúan con el sistema energético y promueven la auto-regulación del cuerpo.
Son seguros, no invasivos y sin efectos secundarios.
¿Para qué se utiliza?
Dolores musculares o articulares (rodillas, espalda, cuello, hombros)
Estrés, ansiedad, insomnio, fatiga
Problemas digestivos, hormonales o circulatorios
Apoyo en enfermedades como artritis, hipertensión, diabetes
Mejora del estado emocional y mental